Eye in the Sky.

Viernes. El día ha amanecido soleado tras los días pasados de nubes y tormentas. Parece que hoy el día será caluroso, uno de esos día típicos de julio. Bueno, estamos en verano, ¿no? lo normal son los días así.

Mi día suena hoy a Alan Parson’s Project, uno de mis grupos favoritos, y su canción más conocida: Eye in the sky. Una canción que, a pesar de ser la más famosa del grupo, no es una de las que más me gustan de ellos. No me entendáis mal, la canción es muy buena y me gusta, pero hay otras que me gustan mucho más. Y que, en mi modesta opinión, son mucho mejores que ésta. Pero esas canciones aparecerán otro día, porque hoy ha sido ésta la que llena mi día.

En este verano raro que estamos viviendo no puedo evitar recordar el del año pasado. Por estas mismas fechas estaba haciendo planes para mis vacaciones. Unos días de relax en la playa, en un tranquilo pueblo costero. Claro que, puestos a recordar vamos a recordarlo todo no sólo lo bueno. Esos días fueron muy relajantes aunque estar tumbada en la hamaca full time está sobrevalorado, pero acabaron un poco de aquella manera. Me fracturé el pie justo el último día (menos mal que no fue el primero). De la manera más tonta, tanto que luego me sentía ridícula cuando explicaba en el hospital como había sucedido. Es por cosas así que no me gusta volver la vista atrás para comparar situaciones. Este verano será raro y atípico, pero por lo menos no he de llevar una escayola y muletas. Que sí, que es posible que lo pase confinada en casa, pero ¡¡¡¡eso ya lo pasé el año pasado!!!! Dos meses de inmovilización, ni siquiera podía pasear por el pasillo. Así que no, cualquier tiempo pasado no fue mejor, simplemente nuestra mente es muy pilla y tiene memoria selectiva, recuerda sólo lo que le interesa que generalmente es lo bueno.

Pues eso, a disfrutar el momento presente, sea el que sea, porque nunca sabes si los que vendrán serán mejores o peores.

Space Oddity.

Viernes con V de volar, de viajar, de verano. Viernes con ganas de ir más allá de los límites y hacer leyenda. Viernes que suena a Bowie y uno de sus temas más legendarios, Space Oddity.

Mañana será otro día, pero hoy toquemos el universo con nuestros oídos y sintamos lo que de verdad somos… ¡polvo de estrellas!

Hasta el infinito: Heaven is a place on earth.

 

Heaven is a place on Earth, canción incluida en el álbum Heaven on Earth de Belinda Carlisle es seguramente el tema más famoso de la cantante. No se puede decir que sea una «one hit wonder» pues tuvo otros temas  bastante conocidos e incluso puso voz a una de las canciones de la película de Disney Hércules, pero sin lugar a dudas su mayor éxito sea este de 1987.

Una canción que aporta buena energía, justo lo que ahora necesito…

Hasta el infinito. Rocket man.

Hace unos días vi un anuncio de una de esas marcas punteras de tecnología que me ha traído de nuevo a la memoria una de las canciones más conocidas de Elton John, Rocket Man.

Rocket Man (I Think It’s Going to Be a Long, Long Time) fue lanzada como single el 17 de abril de 1972 cosechando gran éxito en las listas musicales de todo el mundo. Fue incluida en el álbum nº1 Honky Chateau, del mismo año. Es considerada como una de sus mejores canciones.

Con letra de Bernie Taupin, quien compondría la letra de las mejores canciones de Elton John, la canción cuenta la historia de un astronauta que va al espacio dejando su esposa y familia atrás, a quienes extraña mucho, pero cumpliendo su sueño, de trabajar como más le gusta. Se ha concebido a esta obra como una metáfora de la vida de los famosos de la época que, si bien obtenían fama, dinero y éxito, ello les alejaba de sus familias, sus amigos y el mundo normal. Así el éxito te daba cosas únicas, pero también te quitaba otras. La canción fue nº2 en Gran Bretaña y nº6 en Estados Unidos. Fue a partir de Rocket Man que el británico comenzó a cosechar una larga cadena de éxitos durante la década, donde figuran seis nº1.

Rocket man (I think it’s gonna be a long, long time) Elton John/ Bernie Taupin.

She packed my bags last night pre-flight
Zero hour nine a.m.
And I’m gonna be high as a kite by then
I miss the earth so much I miss my wife
It’s lonely out in space
On such a timeless flight

And I think it’s gonna be a long long time
Till touch down brings me round again to find
I’m not the man they think I am at home
Oh no no no I’m a rocket man
Rocket man burning out his fuse up here alone

Mars ain’t the kind of place to raise your kids
In fact it’s cold as hell
And there’s no one there to raise them if you did
And all this science I don’t understand
It’s just my job five days a week
A rocket man, a rocket man

And I think it’s gonna be a long long time…

No puedo negar que siento debilidad por las canciones de Elton John, en especial las que compuso en la década de los 70, que para mí son sus mejores canciones. Canciones que forman parte por derecho propio de la historia de la música y que siempre es un placer escuchar.

Hasta el infinito: Sirius+Eye in the sky.

The Alan Parsons Project, uno de mis grupos favoritos, nació en 1975 de la unión de Alan Parsons, un reconocido ingeniero de sonido que trabajo en Abbey Road y participó en la grabación de varios discos de los Beatles y también de Pink Floyd; y del productor y cantante Eric Woolfson. Con su rock progresivo firmaron algunas de las mejores canciones de su época. Ese es el caso de la que os traigo hoy, Sirius una composición instrumental que da paso al que quizás sea el tema más famoso de la banda, Eye in the Sky.

Un tema para relajarse en una mañana primaveral de domingo, y alcanzar el infinito sin salir de uno mismo.

¡Feliz y relajado domingo!

Hasta el infinito: Lost Stars.

Desde la banda sonora de la película «Beguin again» protagonizada por Keira Knightley, Mark Ruffalo, Hailee Steinfeld, Adam Levine, James Corden, CeeLo Green, Catherine Keener y Mos Def, nos llega este Lost Stars, interpretado por Adam Levine.

La pasión por la música lleva a Gretta (Keira Knightley) y a Dave (Adam Levine), novios desde el instituto, hasta Nueva York. Pero cuando él, una vez alcanzado el éxito y la fama, la abandona, ella se queda completamente desolada. Una noche, un productor de discos (Mark Ruffalo) recién despedido, la ve actuar en un bar de Manhattan y queda cautivado por su talento. Esta es la trama de la película, en la que encaja como un guante estas «estrellas perdidas» que dan título a la canción. Una canción que me gusta muchísimo. Me pasa con Adam Levine un fenómeno parecido a lo que me ha dado con Santi Balmes… es inexplicable, pero ahí está… que le vamos a hacer…

Hasta el infinito y más allá: Waiting for a star to fall.

Hoy me he levantado un poco «vintage». Me apetecía escuchar música de mi década favorita, los 80’s. No puedo evitarlo, aunque me gusta de música de todos los tiempos, los años 80 fueron «mi» época. La época que más me marcó en muchos sentidos, y evidentemente en el musical también lo hizo.

Así que rebusqué entre las canciones que he encontrado para esta sección, descartando las más minimalistas y las «indies» para decantarme por una más comercial. Waiting for a star to fall del grupo Boys meet girl, publicada en 1988 y que aparecía en la banda sonora de la película «Tres hombres y una pequeña dama»